En la quinta temporada de Girls, Shoshanna (Zosia Mamet) se muda por trabajo a Tokio y hay dos capítulos que nos muestran su vida allí. En el primero (capítulo 3), Japón se presenta como “su lugar en el mundo” donde consigue el trabajo corporativo perfecto para una joven recibida de manejo empresarial. Al comienzo del episodio se nos hace un resumen de su nueva cotidianidad, en un colorido departamento con sus coloridos objetos plásticos y su pelo pintado de rosa. La vemos caminando por la ciudad saturada visual y poblacionalmente, llega a su oficina de estilo minimalista donde hay un joven japonés que le gusta, Yoshi. Por la tarde va a una pileta nudista con sus amigas del trabajo y luego van a comer comidas típicas y “exóticas”. Qué importante es para unx millennial demostrar que son sujetxs del mundo y que podrían vivir en cualquier lado: lo que Byung-Chul Han llama hipercultura, el mundo sin fronteras. Y con este nuevo mundo se constituye una nueva identidad, “la hipercultura no crea una masa cultural uniforme, una cultura única, monocromática. Antes bien, provoca una creciente individualización. Siguiendo las propias inclinaciones, uno arma la identidad a partir del fondo hipercultural de formas y prácticas de vida”. Si a lxs millenials se les exige ser especiales para triunfar, Shoshanna construye su nueva identidad a partir del pastiche de referencias que le permiten ser diferente.